Iglesia de Alaró
07
Altar mayor
Se encuentra ante un retablo extraordinario. Uno de los más espectaculares que se pueden ver en Mallorca.
La principal característica que lo convierte en excepcional es que está labrado en piedra. Más concretamente, en cinco piedras de colores distintos: blanco, negro, amarillo, rojo y avellanado. Los trabajos de construcción empezaron en 1698 y acabaron diecisiete años después. Según la tradición oral, los alaronenses pulían las piedras en sus casa. Circunstancia que generó problemas a la hora de encajarlas.
El conjunto tiene diez columnas de cinco formas, colores y ornamentación diferentes.
Las esculturas representan santos muy relacionados con la historia del pueblo. En el cuerpo inferior, a la izquierda, encontramos a San Sebastián, que fue invocado durante la terrible peste que sufrió el pueblo en 1652. En el centro, está San Bartomeu, titular de la parroquia. A la derecha, San Roque, que también es protector contra la peste y copatrono de Alaró.
Las esculturas del cuerpo superior también son tres. A la izquierda, San Vicente de Paúl. En el centro, está la mejor de las tallas del templo, se trata de la Virgen de la Esperanza, que es la patrona del pueblo. A la derecha, el beato Ramon Llull, uno de los sabios más importantes que ha dado Mallorca.
Entre las pinturas, destacaremos un San Bartomeu en la parte superior del retablo. San Joaquín con la Virgen a la izquierda del segundo cuerpo. Finalmente, a la derecha, se representa a San Felipe Neri.
Hay muchos más detalles. Antes de seguir la visita, aconsejamos mirar con calma esta obra monumental, seguro que encontrará más elementos que refuerzan la importancia capital de este impresionante retablo.
La principal característica que lo convierte en excepcional es que está labrado en piedra. Más concretamente, en cinco piedras de colores distintos: blanco, negro, amarillo, rojo y avellanado. Los trabajos de construcción empezaron en 1698 y acabaron diecisiete años después. Según la tradición oral, los alaronenses pulían las piedras en sus casa. Circunstancia que generó problemas a la hora de encajarlas.
El conjunto tiene diez columnas de cinco formas, colores y ornamentación diferentes.
Las esculturas representan santos muy relacionados con la historia del pueblo. En el cuerpo inferior, a la izquierda, encontramos a San Sebastián, que fue invocado durante la terrible peste que sufrió el pueblo en 1652. En el centro, está San Bartomeu, titular de la parroquia. A la derecha, San Roque, que también es protector contra la peste y copatrono de Alaró.
Las esculturas del cuerpo superior también son tres. A la izquierda, San Vicente de Paúl. En el centro, está la mejor de las tallas del templo, se trata de la Virgen de la Esperanza, que es la patrona del pueblo. A la derecha, el beato Ramon Llull, uno de los sabios más importantes que ha dado Mallorca.
Entre las pinturas, destacaremos un San Bartomeu en la parte superior del retablo. San Joaquín con la Virgen a la izquierda del segundo cuerpo. Finalmente, a la derecha, se representa a San Felipe Neri.
Hay muchos más detalles. Antes de seguir la visita, aconsejamos mirar con calma esta obra monumental, seguro que encontrará más elementos que refuerzan la importancia capital de este impresionante retablo.
Capilla de la Inmaculada Concepción
06
Capilla de San José